Esta receta ha sido publicada en el libro digital de velocidad cuchara: El gran libro de las manzanas. (página 48)

 Ingredientes:

Preparación:

Pelar las manzanas y cortarlas en trozos en forma de cubitos pequeños y regulares.

Poner una sartén al fuego con la mantequilla. Saltear los trocitos de manzana durante 1 minuto sin dejar de saltear. Sacar a un recipiente o plato y dejar enfriar.

Precalentar el horno a 180º

Preparar las capsulas de papel colocándolas en las bandejas especiales para hornearlas.

Pesar y tamizar la harina y mezclarla con la levadura, reservar.

Pesar la leche y reservar.

Poner la mariposa en la Themomix, añadir la mantequilla y el azúcar y sin programar tiempo batir a velocidad 3 hasta que quede cremosa (sin Thermomix con unas varillas)

Bajar la velocidad a 2 añadir los huevos por el bocal uno a uno esperando a mezclar bien uno antes de añadir el otro.

Añadir la canela. Seguir batiendo. Si fuese necesario bajar con la espátula lo que pueda haber quedado en las paredes.

Sin dejar de batir a velocidad 2, ir añadiendo por el bocal la harina y la leche alternando en 3 pasos, empezando y terminando siempre por la harina. Esto es: harina, leche, harina, leche, harina.

Parar la Thermomix, abrir y añadir los dados de manzana, mezclar bien con la espátula.

Con una cuchara sopera echar la masa en cada una de las capsulas llenando ¾ partes.

Introducir en el horno y hornear a 180º aproximadamente durante 25 minutos o hasta que se vea que suben y la parte superior está dorada.

Sacar de las bandejas y dejar enfriar sobre una rejilla.

Para quien no quiera complicarse más con la decoración, servir así tal cual, espolvoreando un poco de de azúcar glas o canela al gusto.

Decoración.

Para una ocasión especial o para hacer con los niños podemos hacer una decoración en forma de manzana, para ello se necesita:

Crema merengue suizo de mantequilla: (Swiss Meringue buttercream)

Poner la mariposa en la Thermomix, añadir las claras de huevo y el azúcar glas, programar 3 minutos, temperatura 37º,  velocidad 1 hasta que se disuelva el azúcar.

Sin programar temperatura ni tiempo, subir la velocidad a 3 ½ y montar las claras a punto de nieve, llevará bastante tiempo unos 10 minutos, se ve y se “escucha” bien cuando están montadas.

Bajar a velocidad 2 ½ y añadir por el bocal cucharaditas de mantequilla, muy importante que esté muy blanda a temperatura ambiente. Esperar a que se integre bien cada cucharada antes de añadir otra.

Cuando acabemos de añadir toda la mantequilla subir de nuevo la velocidad a 3 y batir hasta que se note que la crema cambia de textura completamente, queda como una crema muy espesa.

Separar en dos recipientes, en cada uno de ellos ir añadiendo el colorante (rojo o verde) poco a poco y remover bien con una cuchara o varillas hasta obtener el tono deseado.

Esta crema se puede conservar en la nevera en un recipiente hermético una semana o congelar durante un mes. Si por alguna razón la textura queda inconsistente, como cortada, volver a ponerla en la Thermomix con la mariposa y batir a velocidad 3.

Colorear el azúcar:

Si utilizamos colorantes en polvo meter en una bolsa pequeña de congelado el azúcar y un poco de colorante, cerrar y sacudir fuerte para mezclar, añadir más colorante si es necesario hasta obtener el tono deseado.

Si el colorante es en gel, mezclaros con ayuda de la Thermomix para que no queden grumos. Poner el azúcar y una pizca de colorante y sin tiempo e ir subiendo a velocidad progresiva hasta 7-8 sin pasar de aquí para no llegar a hacerla glas.

Ojo con los dedos y demás que el colorante tiñe mucho.

El azúcar coloreada se puede hacer en mayor cantidad y tener preparada para otras ocasiones u otras recetas.

Decorar:

Cubrir toda la superficie de la cupcake con la crema coloreada, utilizar para ello una manga pastelera sin boquilla.

Poner el azúcar coloreado en una taza grande o un bol pequeño, coger cada cupcake por la parte de abajo del papel y “rebozar” toda la parte de la crema en el azúcar girando y aplastando un poco darle la forma redondeada de manzana.

Hundir con el dedo un poco la parte de arriba y colocar una hojita de menta y un trocito del snack para hacer el rabito. Las hojas de menta deben ponerse justo en el último momento de servir pues no aguantan bien y se ponen mustias.

Por último pintar los ojos y la boca de los gusanos de gominola con un rotulador de tinta comestible y colocar sobre alguna de las “manzanas”.

Se pueden conservar bien en la nevera en un recipiente hermético (sin la menta). Para comer deben estar a temperatura ambiente. Al no llevar nata y al utilizar claras pasteurizadas, no es necesario mantenerlas siempre en frio.