Es una enfermedad genética y consiste en una intolerancia al gluten, que se caracteriza por una reacción inflamatoria en la mucosa del intestino delgado.

El gluten es una proteína que está presente en algunos cereales como el trigo, la avena, la cebada, el centeno y derivados del trigo.

El intestino delgado en condiciones normales está cubierto por unas protuberancias microscópicas, que son las vellosidades intestinales, encargadas de la absorción de los nutrientes de los alimentos. Cuando una persona genéticamente predispuesta ingiere gluten, su cuerpo, lo reconoce, por error, como algo extraño que debe ser eliminado, por lo que genera unos anticuerpos que dañan la pared intestinal, provocando la atrofia de las vellosidades intestinales, dificultando la absorción de los nutrientes: proteínas, grasas, hidratos de carbono, sales minerales y vitaminas. 

Al eliminar el gluten de la dieta, el intestino se regenera y los síntomas desaparecen.

La prevalencia de la EC en España es de 1 por cada 100 personas nacidas vivas, siendo la enfermedad crónica más frecuente en nuestro país. Su base genética justifica que puede haber más de un celíaco dentro de una misma familia.

Sin embargo, se considera que la epidemiología de la EC tiene las características de un iceberg ya que esta prevalencia puede ser mucho mayor puesto que un porcentaje importante de casos permanece sin detectar.

DIETA SIN GLUTEN

Una vez diagnosticada la enfermedad celíaca, el único tratamiento existente consiste en mantener una dieta estricta sin gluten y de por vida. Con ella se consigue, la desaparición de los síntomas, la recuperación de las vellosidades intestinales, asegurando una vida normal y un correcto equilibrio de la salud.

Está demostrado que el consumo continuado de pequeñas cantidades de gluten, puede dañar severamente las vellosidades intestinales o provocar otras alteraciones y/o trastornos importantes nada deseables, incluso en ausencia de síntomas. Para esto debemos basar nuestra dieta en alimentos naturales, carnes, pescados, legumbres, lácteos, frutas, verduras y cereales que no contienen gluten como el arroz y el maíz, y también en alimentos especiales sin gluten.

NUESTRAS RECETAS SIN GLUTEN:

Recomendaciones básicas para la elaboración de menús aptos para celíacos:
Descárgat el folleto informativo de la asociación de Castilla y León

Alimentos apropiados para personas con intolerancia al gluten:
Descargate el folleto Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición.